Tu llama me llama

Tu silencio me aclama
como hojas que revolotean en busca de una llama
apagadas por la fuerte lluvia
y la bruma que te ampara

No logro ver tu desconsuelo
la tierra mojada no distingue tus lágrimas
la simple inocencia con que te miro
la simple imprudencia que genera
la gran tormenta que se vino
y los dos sentados en tu cama.

Tenés que ver la luz al final del principio
debés crecer y ser más que el molino
creer que te quiero
saber que te espero.

Desorbitándome

Siempre pensé que todo llega cuando menos se lo espera. Y mientras tanto varío; ya no espero tanto. Respiro el aire que me llega, te pienso y sonrío. Todo dura instantes. Como si viviera en una burbuja, como si la vida me sonriera. Todo termina brevemente. Ya mis ojos se desorbitaron, ya mi indudable sonrisa desaparece; encuentro la aguja que pinchó mi burbuja; sigo pensando que todo llega cuando menos se lo espera.
Igual, yo te espero.

tu maldita cuerda

No soy lo que dejaste atrás;
giraste tu eje
no volviste a mirar.


Soltaste la cuerda,
miraste hacia acá
sentiste saltar las venas...


¿Y ahora qué va a pasar?


Giraste tu eje
y volviste hacia atrás;
saltaste la cuerda,
miraste hacia allá
volaste tus venas.


¿Y ahora qué va a pasar?