Leudando tu desolación

Pequeños tristes besos
cargados de desolación
no pretendo verlo hoy
solo veo lágrimas secas

y a través de tu pupila no te puedo ver
y debajo de tu piel no puedo tocarte
sólo pude encontrar unos pequeños tristes besos
un pequeño triste abrazo

y ahora no lo entiendo
tus mejillas se inclinan
cual payaso triste
cual inmenso deseo
de correr atrás de nada

no querés tropezar
lo dejás leudar
total...
algún día se te va a pasar.

Te abrazo en la oscuridad
te encuentro dormido entre la ciudad
y no encuentro ninguna respuesta
a este camino hacia tu redención

Camino por tu calle
y una taza cae sobre mi espalda
no encontrás nada que pueda cambiar
y tu mirada sigue estando allá

Ya no te encontrás en ningún lugar
y sólo esperás un milagro, nomás.

Ya estoy cansada de esperar
ya me da vueltas la calecita
Sin palabras que definan bien
lo que estoy ahora sientiendo

tu mirada destartalada

No reconozco mucho lo que soy
oigo gritos en mi cabeza
una extraña sensación
que me abraza y me quema

Veo las cosas seguir adelante de mí
veo las recónditas palabras que te di
y ahora pienso en lo que soy
en lo que fui
en lo que hoy quiero para mí

Oigo el crujir de tus miradas
tan destartaladas
que me abruman en la niebla

Escucho una voz que es mi propia voz
pero a su vez no es mía
camina adentro de mi mente como un simple armatoste
pisando bien fuerte para que pueda oírla

Creyendo en el cambio, poder afrontarlo
pensar que soy otra por cambiarme
la mente es la misma
y ahí está, escondiendo las migajas que robó en el bar

Mendigando una especie de calor insaciable
ahí está; mendigando en la iluminada habitación que dejó ir;
mendigando lo que quiso ser.