domingo, 7 de septiembre de 2014

Ancestros

deja ya tus cosas y empieza a andar
que las cosas se agotan, se van a terminar
deja que las nubes te mojen un poco más
y mientras que el pistilo salga a caminar

y es entonces cuando miras hacia acá
y en el medio del tumulto yo te veo pasar

sueñan los ancestros que te van calzar
tus zapatos sin dejarte lastimar

Hugo

tengo solo ocho años
vivo un recuerdo de antaño
subo la escalera
procurando que me vean

hace mucho frío
y solo quiero escapar
de este oscuro río
que me arrastra hasta el final

tantos sitios olvidados
sobre el suelo que pisamos
tantos niños desahuciados
ante tanta inequidad

mi nombre es Hugo
y tengo que trabajar
la mochila no me pesa
porque no tengo más pan

tengo sed de caricias
hambre de honestidad
enterrado en la ironía
de esta cruda realidad

tantos ojos que no ven
lo que tengo para dar
tanta fama que me hacés
y sin mirar me apartás...

Parque Rivadavia

Un buen día se me dio por indagar
tus pestañas madereras,
viendo imágenes pasar
en ventanas de ciruelas

En el parque Rivadavia se nos dio por descifrar
esas locas ironías que nos llaman de verdad
y entre tanta piel curtida es que vine a figurar

como una llamarada que te quema en la ciudad
nos llevamos en corrientes de agua tibia y de sal

vos tocando el timbre
sonando el despertador
me alimento en las mañanas del sonido de tu voz

y entre todas tus sandeces
y mi tonta rebelión...

siempre amamos despistados
antes de que caiga el sol
nos llevamos en corrientes de agua tibia y de sal

y es que tanta piel unida...
no rebota así nomás.-